La Comisión Europea ha presentado esta semana nuevas medidas en respuesta al aumento de los precios de la electricidad en toda Europa. Las medidas están fuertemente influenciadas por la invasión rusa de Ucrania. La Comisión quiere que Europa acelere el despliegue de energías renovables para aumentar la seguridad energética y, en particular, reducir su dependencia de las importaciones de combustibles fósiles de Rusia.
WindEurope acoge con satisfacción el objetivo de la Comisión Europea de acabar por completo con las importaciones rusas de combustibles fósiles antes de que finalice la década. Con este fin, la Comisión presentó el plan “RePowerEU” con una expansión más rápida de la energía eólica y otras energías renovables en su núcleo.
La Comisión Europea reitera el papel central de las energías renovables para garantizar la seguridad energética de Europa. Europa aún importa el 58 % de su energía, en su mayoría combustibles fósiles y, a menudo, de países que plantean graves riesgos geopolíticos. La energía eólica es de cosecha propia y más barata que los combustibles fósiles importados. Cada parque eólico contribuye a que Europa sea menos dependiente de las importaciones de combustibles fósiles.
La Unión Europea quiere que la energía eólica sea el 50% de su electricidad para 2050. Esto significa expandir la energía eólica marina de los 173 GW actuales a 1000 GW y la energía eólica marina de 16 GW a 300 GW. La Comisión sugiere que otros 30 GW de energía eólica, además de los 450 GW que prevén sus escenarios de descarbonización, podrían implementarse para fines de 2030.
Crucialmente, todo esto depende de los permisos. La Comisión Europea reconoce la necesidad fundamental de simplificar la autorización de nuevos proyectos de energía renovable. Mejorar los permisos es “una cuestión de urgencia” para la transición energética de Europa. Los procedimientos de autorización largos y demasiado complejos son el principal cuello de botella para la expansión de la energía eólica. Actualmente, la UE está construyendo solo alrededor de la mitad de los nuevos parques eólicos que necesita construir para cumplir su objetivo de energía renovable del 40%. La Comisión Europea presentará una guía para los gobiernos nacionales sobre cómo mejorar la concesión de permisos en mayo de 2022.
WindEurope acoge con satisfacción el reconocimiento por parte de la Comisión Europea del papel fundamental de la cadena de suministro de energía eólica europea para garantizar nuestro suministro de energía. La energía eólica proporciona 300.000 puestos de trabajo en 248 fábricas en Europa y aporta 37 000 millones de euros al PIB de la UE cada año. Cada nueva turbina instalada en Europa genera de media 10 millones de euros de actividad económica. Pero Europa no está construyendo suficiente energía eólica nueva. El lento desarrollo actual de la energía eólica ha dejado la cadena de suministro de energía eólica de Europa en mal estado. Sin medidas contundentes que apoyen la cadena de suministro europea, no habrá una transición energética “hecha en Europa”.
“Más que nunca, Europa ahora necesita aprovechar sus enormes recursos de energía eólica. Acelerar el crecimiento de la energía eólica es fundamental para lograr la seguridad energética. Y tenemos que hacerlo con tecnología europea. Europa debe hacer todo lo posible para preservar nuestra cadena de suministro de energía eólica líder en el mundo. Permitir acelerar. Tener subastas eólicas más inteligentes que tengan en cuenta las contribuciones de la energía eólica a una economía sólida, resistente y circular. E impulsar la investigación y el desarrollo”, indica Giles Dickson, CEO de WindEurope.
La rápida expansión de las energías renovables requiere grandes volúmenes de nuevas inversiones. Para ello, las reglas del mercado eléctrico europeo deben proporcionar estabilidad regulatoria. WindEurope acoge con satisfacción la decisión de la Comisión de mantener el diseño actual del mercado mayorista. Significa más inversiones en energías renovables. Y más seguridad energética.
El documento de la Comisión establece medidas destinadas a mitigar el impacto de los altos precios de la electricidad en los hogares y empresas vulnerables. WindEurope apoya este objetivo. Los gobiernos nacionales deben priorizar el uso del aumento del precio del carbono y los ingresos fiscales que resultan de los altos precios de la energía para proteger a los consumidores vulnerables.
Ciertos gobiernos nacionales han introducido o están considerando medidas de recuperación para gravar lo que consideran “beneficios extraordinarios”. La Comunicación de la Comisión establece condiciones muy claras para el uso de tales medidas. Deben aplicarse durante un período de tiempo limitado y estar vinculados a condiciones de mercado predefinidas. No pueden aplicarse retroactivamente. Y no deben aplicarse a la electricidad que los generadores ya hayan vendido a plazo a través de PPA a largo plazo o contratos bilaterales.
WindEurope pide a la Comisión Europea que se asegure de que los gobiernos nacionales apliquen estas condiciones. Un uso equivocado de las medidas de recuperación crearía distorsiones en el mercado, disuadiría la inversión y descarrilaría la expansión de las energías renovables que se necesita con urgencia.