ABO Energy avanza en el desarrollo de proyectos híbridos en España, combinando tecnologías renovables con almacenamiento en baterías e hidrógeno verde. El objetivo es claro: maximizar la integración de energías limpias, optimizar la red eléctrica y reforzar la estabilidad del sistema.
En el camino hacia la descarbonización, la hibridación de renovables con sistemas de almacenamiento se ha consolidado como una solución clave. Integrar tecnologías como la eólica y la solar fotovoltaica con baterías o hidrógeno permite reducir la intermitencia y garantizar un suministro más estable y predecible.
Con una sólida trayectoria internacional, ABO Energy ha desarrollado proyectos híbridos en distintos mercados, integrando eólica, solar y almacenamiento, para mejorar la eficiencia operativa. Un ejemplo destacado es el proyecto híbrido de 1,5 MWp en Wahlheim, Alemania, que combina tecnología solar con almacenamiento en baterías y que entró en funcionamiento en 2022.
El conocimiento y la experiencia adquirida por la empresa en otros mercados se está trasladando ahora al contexto español, con el impulso de nuevos desarrollos híbridos. “Estamos combinando tecnologías renovables con sistemas de almacenamiento. Estas iniciativas están alineadas con las necesidades del PNIEC y los lineamientos de la Unión Europea, que destacan la importancia del almacenamiento energético para garantizar la calidad del suministro eléctrico y reducir la dependencia de combustibles fósiles”, señala Óscar García, Managing Director de ABO Energy España.
Beneficios de la hibridación y el almacenamiento
La incorporación de almacenamiento en proyectos renovables ofrece múltiples ventajas. Por un lado, permite evitar vertidos de energía durante horas de baja demanda y precios cero o negativos, facilitando su aprovechamiento posterior. Esto favorece la estabilidad del sistema eléctrico, reduce la huella de carbono y disminuye la volatilidad de los precios de mercado.
Además, el almacenamiento dota a las instalaciones híbridas de la flexibilidad necesaria para participar en servicios de ajuste, lo que genera ingresos adicionales. En un sistema con un creciente peso de fuentes renovables intermitentes, el papel del almacenamiento para equilibrar generación y demanda será cada vez más indispensable.
Por otra parte, la hibridación permite optimizar infraestructuras existentes, lo que se traduce en menores costes operativos, mayor eficiencia y una mejor rentabilidad de los proyectos.
Un ejemplo concreto de hibridación es la incorporación de aerogeneradores y/o baterías a una planta solar ya existente, lo que permite complementar la producción en horas sin sol y/o almacenar el excedente energético para su uso posterior. ABO Energy también impulsa desde el inicio proyectos que combinan eólica y solar, o incluso eólica, solar y baterías, aprovechando al máximo los recursos del emplazamiento y adaptando la generación a las necesidades del sistema eléctrico.
“Los proyectos de ABO Energy no solo buscan aportar soluciones energéticas limpias y eficientes, sino también contribuir activamente al cumplimiento de los objetivos nacionales e internacionales en materia de energía y clima. La experiencia adquirida en otros mercados nos permite afrontar los retos de la hibridación y aportar valor añadido al sector energético español”, afirma Óscar García, quien también subraya el compromiso de la empresa con los territorios donde opera. “Antes de planificar cualquier hibridación, establecemos un diálogo con la administración para garantizar la compatibilidad medioambiental y social en cada zona”, concluye.
Proyecto híbrido en Wahlheim, Alemania. FOTO: ABO Energy