España necesita un aceleración en la tramitación de parques eólicos para cumplir con el PNIEC y dar continuidad a la industria eólica en nuestro país

España ha sido el quinto país en potencia eólica contratada hasta el tercer cuarto del año con 598 MW, que es un 30 % menos que el año pasado, una cifra que (a falta del último trimestre del año) está muy lejos de la potencia eólica que es necesario contratar para instalar anualmente hasta 2030 para cumplir con los objetivos del PNIEC, (2.500 MW[1] al año para alcanzar los 50,3 GW del Plan) . Al mismo tiempo son cifras que no son buenas para la industria eólica española que sigue funcionando por debajo de su capacidad manufacturera debido a la falta de pedidos del mercado español generada por la lentitud en la tramitación de parques eólicos de las administraciones.

Los malos datos anteriores además se suman a los de los pedidos de años anteriores. Como se puede ver en el gráfico, el mercado español sólo ha contratado algo menos de 2.000 MW desde 2020 cuando se tendrían que haber contratado al menos 6.600 MW para avanzar en la senda correcta para el cumplimiento del PNIEC.

[1] Originariamente, según los datos del PNIEC se tenían que instalar 2.200 MW para alcanzar el objetivo de 50,3 GW para 2030, pero como el ritmo de desarrollo de nuevas instalaciones eólicas ha sido muy inferior al necesario en el periodo 20-22, a partir de 2023 va a ser necesario instalar anualmente 2.500 MW para alcanzar el objetivo del PNIEC.