Incremento de la aportación del sector eólico español en los principales indicadores socioeconómicos a nivel nacional y autonómico

22 de diciembre de 2023
  • El sector eólico supone el 0,50% del PIB en España (0,49% año anterior), genera más de 39.000 empleos (32.000 año anterior, un 14% de incremento), exporta más de 2.500 millones de euros y ahorra 6.492 millones de euros en la importación de combustibles fósiles. Gracias a la eólica, se evita la emisión a la atmósfera de 32 millones de toneladas de CO2.
  • El ritmo de instalación de la potencia eólica en 2022 (1.640 MW) es superior a la cifra de 2021, pero no es el adecuado para cumplir la senda del PNIEC. Estamos por debajo del ritmo necesario para cumplir con los objetivos españoles y europeos.

El Estudio Macroeconómico del Impacto del Sector Eólico en España, elaborado por Deloitte para la Asociación Empresarial Eólica (AEE), tiene como objetivo analizar el impacto que el sector eólico tiene sobre la economía española. En este nuevo Estudio, se incluyen datos sobre la aportación de la energía eólica en las distintas comunidades autónomas.  

2022 fue un año relevante para la eólica en España con un incremento de potencia de 1.640 MW. A 31 de diciembre de 2022, España contaba con 29.813 MW eólicos en total. La generación eólica fue de 61.069 GWh, lo que supone una cobertura de la demanda del 24%. La energía eólica fue la segunda tecnología de generación.

Los principales indicadores del sector eólico en España

  • En 2022, la generación eólica fue de 61.069 GWh, lo que supone una cobertura de la demanda del 24%. De esta manera, la energía eólica fue la segunda tecnología en el mix energético.
  • La eólica ha pasado del 8% en 2005 al 24% en el último año en la cobertura de la demanda con eólica.
  • La contribución total del sector eólico al PIB, sumando directa e indirecta, alcanzó los 5.896 millones de €, un 0,50% del PIB en España. La contribución directa del sector eólico al PIB de España en 2022 ascendió a 4.012 millones €, mientras que la contribución indirecta supuso 1.883 millones €.
  • El sector emplea a 39.015 personas (18.278 empleos directos y 20.737 empleos indirectos). El incremento en empleo respecto al año anterior es de un 14%.
  • En 2022, la actividad exportadora supuso 2.512 millones de €. España es el quinto exportador bruto del mundo de aerogeneradores, por detrás de Alemania, Dinamarca, China e India.
  • En 2022, la energía eólica ahorró la importación de 86 millones de barriles de petróleo equivalentes (11,7 millones de teps), con un valor de 6.491,7 millones de €. Esto equivale al gas natural que transportan 147 buques metaneros.
  • En términos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, en2022 se dejaron de emitir 32 millones de toneladas de CO2. El valor de los correspondientes derechos de emisión de CO2 ahorrados es de 2.314,4 millones de €.
  • El sector eólico continúa soportando una carga fiscal importante. Por cada 1.000 € de ingresos, 123 € se dedican a pagos de impuestos y tributos.
  • En 2022, el sector eólico realizó inversiones en I+D equivalente al 3,36% de su contribución al Producto Interior Bruto: 134,9 millones de €.
  • La generación eólica tiene efecto reductor sobre los precios de la electricidad y sobre los propios ingresos del sector. El uso de potencia eólica en lugar de combustibles fósiles permitió ahorrar a los consumidores españoles 7.358 millones de € en 2022 (31,25 €/MWh), debido a la reducción en el precio del pool del mercado eléctrico.

La eólica en las Comunidades Autónomas

Los parques eólicos en España están ubicados en prácticamente todas las comunidades autónomas. En España hay en total 8.135 municipios y en 1.053 hay una instalación eólica. Un 10% de los municipios españoles tienen presencia eólica, y un 11% de la población española vive en municipios en los que hay parques eólicos.

La potencia eólica se concentra en cinco comunidades autónomas con el 79% del total: Castilla León, Aragón, Castilla-La Mancha, Galicia y Andalucía. Estas cinco, de las 17 Comunidades Autónomas, supusieron un 74,8% de la contribución al PIB, siendo Castilla y León, con un 19,8%, Galicia, con un 19%, Aragón con un 14,3%, Castilla-La Mancha con un 11,3% y Andalucía con un 10,3%.

Las provincias con mayor presencia de parques eólicos son Lugo, con un 51% de los municipios con tienen presencia eólica, Las Palmas de Gran Canaria, con un 47%, o La Coruña con un 46%.

En Zaragoza tan sólo el 17% de los municipios acogen algún parque eólico, mientras que un 81% de la población convive con ellos. Esto se debe a que existen varios parques eólicos en el municipio de Zaragoza, en el que vive un 70% de la población de la provincia.

En Galicia, el porcentaje de municipios con parques eólicos asciende al 35%, valor muy superior al 21% de la población que vive en estos municipios. Esto indica que los parques se desarrollan en los municipios de menor tamaño.

Se puede señalar que las provincias en las que una mayor cantidad de población está situada en un municipio con potencia eólica son Albacete (82%) y Zaragoza (81%), seguido de Valladolid (con un 63%), Palencia (con un 61%), y Las Palmas de Gran Canaria (con un 49%).

Analizando el número de provincias puede concluirse que los parques eólicos tienden a localizarse en municipios en los que la población es más baja (la España Vaciada), contribuyendo a fijar población, dado que generan actividad económica y empleo.

Conclusiones y retos del sector eólico en España

  • La apuesta de España realizada por la eólica ha resultado ser la mejor inversión país en el campo energético de los últimos 20 años. El balance neto es claramente positivo hacia la tecnología por los beneficios que supone para la economía y la sociedad.
  • El sector eólico es estratégico para la economía y la autonomía industrial y tecnológica de nuestro país. Su aportación al PIB es equivalente al de otros sectores “marca España”. La aportación al PIB de este año analizado supera los anteriores, situándose en el 0,50%.
  • El incremento de empleo en 2022 respecto al año anterior es de un 14%, más de 39.000 profesionales. El sector eólico contribuye a la empleabilidad del país. En las CCAA donde hay presencia eólica, la tasa de desempleo es inferior, lo que ayuda a anclar a la población en el entorno rural.
  • El ritmo anual de instalación de la eólica es inferior al necesario para cumplir con los objetivos nacionales y europeos de integración de renovables. Acelerar el “permitting eólico” debe ser una prioridad además de dar señales de estabilidad regulatoria para atraer financiación a nuestro país y evitar deslocalizaciones industriales a futuro.
  • Es necesario apostar por la repotenciación de parques eólicos. Aspectos como la declaración de los parques a repotenciar como “bienes de interés público prioritario”, la “evaluación de impacto ambiental adicional” y el cumplimiento de los plazos máximos de tramitación establecidos en Europa deben ser implementados en nuestro país.
  • Es crítico avanzar en la electrificación para usar todo el potencial de las renovables y poner en marcha políticas decididas que faciliten el crecimiento de la demanda eléctrica acorde al escenario que establece el PNIEC. Avanzar en políticas de planificación y ordenación del despliegue renovable, el almacenamiento, el hidrógeno renovable de forma sincronizada debe ser una prioridad.
  • Es urgente proteger nuestra cadena de suministro eólica frente a la presión de terceros mercados (principalmente China) por liderar la capacidad de fabricación global. Para mantener el tejido industrial y el papel internacional de la industria eólica española (5º país en exportación de aerogeneradores del mundo) es necesario poner en marcha políticas a nivel nacional y europeo, ambiciosas y ágiles, que ofrezcan estabilidad y protección frente a otros mercados. El Wind Power Action Plan europeo debe ser implementado en España con la mayor celeridad posible.
  • Es necesario aprobar el marco regulatorio de la eólica marina y convocar la primera subasta en España. 2024, año del despegue de la eólica marina en España. La eólica marina flotante es una oportunidad de país por la creación de nuevos empleos y por las sinergias con otras actividades industriales, como la industria naval o la portuaria, entre otras. El PNIEC identifica como retos específicos la instalación de al menos 3 GW de eólica marina en 2030 y para conseguirlo debemos disponer de la primera subasta a lo largo de 2024.
  • El diálogo y el consenso social son imprescindibles para la sensibilización, conocimiento y aceptación de los proyectos renovables en los territorios. Es responsabilidad de todos (empresas, las administraciones y las comunidades locales) sumar esfuerzos para avanzar en el desarrollo de los parques eólicos, aportando pedagogía, trabajando anticipadamente y evitando escenarios de utilización política de las energías renovables.