Consolación Quintana, docente e investigadora en la Universidad de Castilla-La Mancha, es la protagonista de la entrevista del mes en nuestra newsletter

29 de noviembre de 2022

Consolación Quintana, docente e investigadora en la Universidad de Castilla-La Mancha, es la protagonista de la entrevista del mes en nuestra newsletter.

Consolación Quintana, es personal docente e investigador de la Universidad de Castilla-La Mancha, más concretamente, de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Ciudad Real, donde imparte docencia en los Grados de Administración y Dirección de Empresas (ADE), doble Grado en Derecho-ADE y en el Máster Universitario Oficial en Modelización y Análisis de Datos Económicos. Adscrita al Departamento de Economía Aplicada, realiza sus labores de docencia en el área de Estadística Empresarial y Económica. En cuanto a la investigación, pertenece al Grupo de Investigación Seminario de Economía Sostenible, SES. Anteriormente ha desempeñado posiciones en empresas privadas en departamento financiero y contabilidad, así como en diferentes sucursales bancarias. Fue en 2016 cuando comenzó su andadura en la Academia. Es Doctora en Economía y Empresa por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Máster en Asesoramiento y Planificación Financiera por la Universidad Rey Juan Carlos y Especialista en Liderazgo y Dirección de Equipos, por la UCLM.

1. A través del grupo de investigación Seminario de Economía Sostenible de la Universidad de Castilla La Mancha (UCLM), en el que trabajas, habéis emprendido estudios y análisis para evaluar el aprovechamiento de las energías renovables y su repercusión en el mercado eléctrico, mediante modelización econométrica y optimización matemática. ¿En qué consiste exactamente?

De una manera muy resumida, el objetivo principal de esta investigación es la evaluación, desde una perspectiva empírica, de la importancia que las energías renovables en general y de la eólica en particular, tienen en el proceso de transición energética, pues lo consideramos una cuestión clave en la lucha contra el cambio climático. Efectivamente, de los tres grandes sectores energéticos (electricidad, calefacción y refrigeración, y transporte), nos centramos en el sector de la electricidad pues es aquel que mayor porcentaje de energías renovables presenta en términos de capacidad instalada. Y en concreto, nos centramos en la energía eólica terrestre, pues presenta una mayor capacidad de generación de electricidad, sin incluir la hidro.

Aplicamos técnicas econométricas que nos permiten representar de una forma objetiva y también reproducible, el sistema de relaciones que caracterizan el desarrollo de las energías renovables; identifica las principales variables que influyen en su desarrollo y a su vez, permite analizar, en este sistema, las repercusiones de diversos escenarios a un nivel técnico, económico, político y social.

Una vez seleccionados estos factores determinantes de las adiciones de capacidad de generación eléctrica mediante energía eólica, para una determinada área geográfica y un horizonte temporal, integramos este modelo econométrico con un modelo de optimización matemática para evaluar la viabilidad de las políticas en diferentes escenarios de despliegue eólico. Con esta metodología cuantificamos la relevancia que cada relación entre las variables juega en el cumplimiento de los objetivos propuestos y, por lo tanto, nos permite identificar las relaciones clave del sistema.

Es por ello por lo que consideramos esta información como una herramienta muy interesante para el decisor político.

2. ¿Cuál ha sido tu línea de investigación principal?

Desde el año 2016 comencé la investigación en temas relacionados con la economía de las energías renovables, y más concretamente como decía en la pregunta anterior, con la tecnología eólica.

Fruto de esta investigación desarrollé mi Tesis Doctoral que lleva por nombre “Evaluación económica de escenarios energéticos mediante optimización matemática en un marco econométrico multiecuacional. El caso del sector eólico español”, cuyo contenido se publicó en revistas científicas de alto impacto. Dirigida por el Investigador Principal del Grupo de Investigación al que pertenezco: Seminario de Economía Sostenible, el profesor catedrático Miguel Ángel Tarancón y nuestro Decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de Ciudad Real (FCDS CR), el profesor catedrático Fernando Callejas.

Aunque mi línea de investigación principal ha sido el análisis del despliegue de tecnologías de generación eléctrica mediante el aprovechamiento de las fuentes renovables de energía y su repercusión en el merco eléctrico, mediante modelización econométrica y optimización matemática, también he investigado sobre el mercado financiero y las nuevas formas obtención de información a través de las redes sociales, recibiendo un premio al mejor proyecto de investigación por Bolsas y Mercados Españoles (BME), en el año 2013.

Actualmente he retomado esta línea, enfocada en el análisis de la aceptabilidad social en el entorno de las renovables. Y estoy codirigiendo una Tesis Doctoral en este tema.

3. En los últimos tiempos han surgido zonas de la geografía española que cuestionan el desarrollo de las renovables y de la eólica en concreto. ¿Cómo se pude cambiar esta posición desde el punto de vista universitario cuando en muchos casos se mueven sentimientos muy primarios?

Las tres grandes misiones de las Universidades son: formación, investigación y transferencia. Es decir: generar, difundir y transferir conocimiento.

Desde el prisma de la inteligencia emocional, las emociones básicas son innatas. Siguiendo a Paul Ekman (1934) y en sus investigaciones de la teoría de la evolución de Darwin, existen seis emociones básicas: tristeza, enfado, miedo, asco, alegría y sorpresa. La tristeza nos avisa de estar experimentando una pérdida de algo valioso para nosotros (terreno, contaminación visual, …); en el enfado se percibe que están sobrepasando nuestros límites con acciones injustas y que coartan nuestra libertad; a través del miedo, nos avisa que salimos de nuestra zona de confort y nos encontramos ante una situación de peligro que no sabemos cómo abordar y, por último, el asco nos avisa de que hay alguna situación, objeto o persona, que no nos gusta y nos causa rechazo.

Como Universidad tenemos la capacidad de generar, difundir y transferir conocimiento sobre el tema. La información es poder, y la desinformación puede causar este estado de alerta ante una situación de desconocimiento.

Considero imprescindible la labor de la divulgación de la ciencia, en este caso en nuestro ámbito de estudio, las energías renovables y en concreto, la energía eólica.

El motivo es claro: lo que no se divulga, no se conoce. Esto unido a las masivas noticias falsas con relación a las renovables y al cambio climático, se torna imprescindible realizar un esfuerzo para acercar la ciencia a la sociedad en general, y a nuestros alumnos universitarios, en particular; proporcionándoles una buena información sobre el tema.

4. Exactamente, ¿qué resultados arrojan vuestro modelo?

Como decía, se propone una herramienta de viabilidad de las políticas y toma de decisiones. Suponiendo el escenario propuesto, el sistema identificó varios coeficientes como los más relevantes a la hora de determinar la viabilidad del escenario siendo: la influencia del apoyo a las renovables y la demanda de electricidad en las adiciones de capacidad eólica; los efectos del PIB en la demanda de la electricidad; la influencia del apoyo de las fuentes de energías renovables en los precios de la electricidad; el impacto de los costes de transporte de la electricidad y los impuestos en el precio de las mismas.

Resumiendo, nuestro análisis de sensibilidad indicaba que la viabilidad del escenario propuesto, teniendo en cuenta las restricciones establecidas por el modelo econométrico multiecuacional, aumenta con un menor apoyo a las fuentes de energías renovables, una mayor capacidad instalada de energía eólica, una menos demanda de electricidad y un mayor PIB. Lo que sugiere el papel relevante que tienen las políticas de eficiencia energética.

5. ¿Existe una buena realimentación entre las actividades de investigación y la formación que se imparte en las universidades o son áreas con poco solape?

Investigación y formación van de la mano.

Apoyados siempre por nuestra Facultad y por la Universidad de Castilla-La Mancha, desde la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación, UCLM Divulga, es posible transmitir de una forma cercana y amena a los estudiantes nuestras investigaciones. Por ejemplo, en el curso pasado, se llevaron a cabo varias actividades de divulgación científicas, en colegios e institutos, y en nuestra propia Facultad, en el que tuve la oportunidad de exponerles una ponencia con título “La economía y el cuidado del planeta no están reñidos”.

A su vez, nuestro proceso de enseñanza y aprendizaje está enmarcado en el Espacio Europeo de Educación Superior y con él, la obligatoriedad de realizar y defender trabajos fin de estudios (trabajos fin de grado y/o máster). Desde nuestra área de conocimiento, Estadística Económica y Empresarial, de la FDCS CR, proponemos varios temas de estudio, destacando el sector de las energías renovables.

6. Conscientes del papel primordial que el sector agrícola juega en la región de Castilla La Mancha, tenéis en marcha una investigación que analiza los drivers de la producción de energías renovables en el mismo. ¿Cómo influye?

Nuestro IP del grupo de investigación, Miguel Ángel Tarancón junto con dos profesoras del grupo, María Jesús Gutiérrez Pedrero y María Jesús Ruiz Fuensanta, desarrollaron un estudio sobre la evolución de la capacidad instalada de energía eólica para un conjunto de regiones españolas durante el período comprendido entre 2004 y 2017. Los resultados obtenidos confirmaron que, existían factores ligados a la inversión y al conocimiento ambiental capaces de condicionar el despliegue de la energía eólica a nivel regional.

7. ¿Qué papel juegan las universidades y centros docentes en la investigación de diferentes temáticas relacionadas con las energías renovables? ¿Qué apoyos demandáis por parte de las administraciones locales, central y europea?

Como indicaba, el rol de las Universidades reside en fomentar la formación integral de la sociedad.

Participé como revisora experta en el proyecto europeo con nombre “Energy Transition and the Future of Energy Research, Innovation and Education: An Action Agenda for European Universities”, enfocadas en la creación y adaptación de programas académicos de másteres y doctorados. Algunas de mis propuestas de mejora fueron la necesidad de una enseñanza basada en casos (learning by doing), una mayor interacción entre universidades y otros stakeholders. Básicamente es necesario que todos los académicos de diferentes disciplinas trabajemos juntos en un enfoque holístico para lograr el desarrollo de soluciones a los desafíos energéticos; en la necesidad de un modelo de formación en educación en energías renovables, no solo basándose en los programas de postgrados, como se propone en el proyecto UNI-SET, sino también en los propios grados, que en parte ya se están llevando a cabo gracias a las investigaciones en trabajos fin de estudios, como decía anteriormente.

En la Universidad de Castilla-La Mancha, disponemos en nuestros planes de estudio, de algunos títulos de postgrado como el título Experto en Economía Circular y Territorio, el Máster Universitario en Crecimiento y Desarrollo Sostenible, el MU en Sostenibilidad Ambiental en el Desarrollo Local y Territorial, el MU Erasmus Mundus en Ingeniería de Bioproductos y Biomasa Sostenible, o el de Formación Permanente en Derecho Ambiental y Sostenibilidad, que fomentan el cuidado del planeta; pero no existen programas específicos de energías renovables. Por su parte, sí que existen diferentes grupos de investigación, como por ejemplo el Instituto de Investigación en Energías Renovables, liderado por el profesor Emilio Gómez Lázaro.

En definitiva, y no es algo nuevo, es esencial el incremento de fondos, para el establecimiento de nuevos programas académicos, así como para el impulso de la investigación.

8. Para conocer a nuestra protagonista:

Libro preferido: tengo muchos, pero si he de quedarme con uno solo elegiría “Piense y hágase rico” de Napoleon Hill, por la forma en la que cambió mi modo de ver y vivir la vida

Serie: Corta: Gambito de Dama. Larga: Dexter.

Película: La gran apuesta.

Color: Verde

9. En nuestro día a día, todos podemos aportar a la lucha contra el cambio climático. ¿Cuál es su propuesta de medida concreta para que nuestros lectores puedan aplicar desde hoy en su rutina?

Todos podemos y debemos aportar nuestro granito de arena para el cuidado de nuestra madre Tierra, mitigando así los efectos del cambio climático.

Llevando a cabo pequeños (pero grandes) actos, con un estilo de vida orientado a la sostenibilidad, al cero residuo, la reducción al máximo de todos los residuos, y el consumo de plásticos y productos tóxicos de nuestra vida, reciclar y reutilizar en la medida de lo posible; realizando compras principalmente locales, por ejemplo, y recordándonos a nosotros mismos que el producto más sostenible es el que ya poseemos en casa.

Fomentando el uso de cuadernos digitales para no tener que imprimir, ni usar papel. Y si se usa papel, que sea reciclado y con marcas que respeten al medio ambiente.

Desde nuestra posición de docentes, investigadores y divulgadores, compartir, con el objetivo de aprender, desde pequeños la importancia de la necesidad de un cambio en nuestra relación con el planeta. También es importante divulgar la relevancia del papel de las energías renovables, para fomentar la aceptabilidad social a las mismas, pues juegan un papel crucial en la transición energética.